Un viento parecido a una plaga sopla a través de la extensión árida y arenosa de un Japón postapocalíptico. Al arrasar con los vivos y los no vivos, el óxido es todo lo que queda a su paso. Se cree que la causa del estado catastrófico del mundo son las esporas de los hongos. Bisco Akaboshi, conocido como el «hongo devorador de hombres», es un arquero criminal buscado cuyas flechas hacen crecer instantáneamente hongos dondequiera que caigan. Sin embargo, en realidad es un «Protector de Setas», una persona que propaga hongos para enriquecer la tierra y devolverla a su estado anterior.
Junto con el cangrejo Akutagawa y el joven médico Milo Nekoyanagi, Bisco se aventura por los páramos de Japón en busca del legendario «Sabikui», un hongo panacea del que se dice que devora toda forma de óxido.
